Las entrevistas laborales son una herramienta esencial en los procesos de atracción de talentos. Su éxito radica en la capacidad del entrevistador para evaluar adecuadamente las habilidades, competencias y aptitudes de los candidatos, lo cual determina si estos son aptos para el cargo. En este sentido, es crucial que los entrevistadores desarrollen habilidades que les permitan llevar a cabo entrevistas exitosas y evitar errores comunes.
Una entrevista bien conducida puede revelar las habilidades y la idoneidad de los candidatos para el cargo. El entrevistador debe ser capaz de identificar las competencias técnicas y personales necesarias para el puesto y evaluar cómo estas se reflejan en las experiencias y logros de los candidatos. Además, un entrevistador experto debe saber identificar posibles áreas de mejora y evaluar si estas pueden ser abordadas con capacitación o desarrollo interno.
Sin embargo, en muchas ocasiones se pueden cometer ciertos errores al momento de realizar una entrevista al momento de seleccionar talentos:
- Preguntas cerradas o sugestivas: Formular preguntas que lleven a respuestas de «sí» o «no» o que sugieran una respuesta específica, limita la capacidad de obtener información valiosa sobre el candidato y su experiencia.
- Falta de preparación: No revisar previamente el perfil del candidato, su CV y la descripción del puesto puede llevar a cabo un enfoque inadecuado de la entrevista y la incapacidad de identificar si el candidato cumple con los requisitos necesarios.
- No seguir una estructura o guía: La falta de una estructura clara en la entrevista puede llevar a cabo una conversación desorganizada y dificultar la recopilación de información relevante para evaluar al candidato de manera efectiva.
- Interrumpir al candidato: Interrumpir frecuentemente al candidato puede generar incomodidad y dificultar que este se exprese libremente, lo cual puede afectar la calidad de la información obtenida.
- Preguntas ilegales o inapropiadas: Realizar preguntas relacionadas con la vida personal, orientación sexual, religión, origen étnico u otros temas no relacionados con el trabajo pueden llevar a discriminación y violación de la privacidad del candidato.
- Falta de empatía y habilidades de comunicación: No establecer una conexión adecuada con el candidato y no ser receptivo a sus respuestas puede generar un ambiente incómodo, lo que puede afectar la calidad de la información obtenida durante la entrevista.
- Sesgos y prejuicios personales: Permitir que creencias, prejuicios o estereotipos personales influyan en la evaluación del candidato puede llevar a cabo una selección injusta y sesgada.
- Falta de objetividad en la evaluación: No contar con criterios claros y objetivos para evaluar las habilidades y competencias del candidato puede resultar en una evaluación subjetiva y poco confiable.
- No tomar notas la entrevista: La falta de registro de las respuestas y observaciones durante la entrevista puede dificultar la comparación y evaluación de candidatos en una etapa posterior del proceso de selección.
Para evitar estos errores, es fundamental que los entrevistadores reciban capacitación y desarrollen habilidades específicas en la realización de entrevistas de selección, asegurando una evaluación efectiva y justa de los candidatos. En Workmate ofrece un servicio de coaching en procesos de atracción de talentos, enfocado en enseñar a las personas a realizar entrevistas laborales exitosas. Este servicio aborda aspectos clave como la formulación de preguntas adecuadas, la identificación de habilidades y competencias, y la evaluación de la idoneidad de los candidatos para el cargo.